Bendiciones, el día de hoy les compartiré acerca de la oración matutina, veremos por qué es tan importante y que dice la biblia acerca de esto.
Versículo del día.
Proverbios 8:17 Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan.
Meta: Tomar un tiempo de comunión con Dios durante el día.
Reflexiona:
En la biblia encontramos personas que en algún momento presentaron a Dios su vida mediante la oración cada mañana. Es importante presentarle a Dios tu día antes de hacer cualquier cosa, puesto que, si le entregamos a Dios nuestro día, obtendremos su dirección en todo lo que vayamos a hacer.
Existen personas que cada día presentan su día a Dios, pidiendo protección, guianza, pidiendo una petición específica, y otros tienen la costumbre de orar porque para ellos es importante, o porque consideran que es la mejor forma de comenzar el día. Sea cual sea la motivación de la oración, debemos considerar la oración matutina. Dicha oración se acostumbra a hacer entre la noche y el amanecer.
¿Por qué es importante la oración matutina?
Es interesante observar que cuando los hombres y mujeres llevaban a cabo una acción importante lo hacían muy de mañana. Cuando Moisés iba a presentarse delante de Dios, lo hacía de mañana, en el caso de Abraham, cuando fue a despedir a Agar y a su hijo Ismael del campamento, o cuando fue a sacrificar a su hijo Isaac, lo hizo de mañana. También las mujeres fueron muy temprano al sepulcro con especies aromáticas para ungir a Jesús. Es decir, que cada vez que se iba a hacer algo de suma importancia, cómo hacer voto a Dios, o presentar adoración y sacrificios, y cuando se quería escuchar a Dios, las personas tenían la costumbre de hacerlo en el horario de la mañana.
David era una de las personas que se presentaba a Dios de mañana. Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. David presentaba a Dios sus peticiones y esperaba una respuesta de parte de Dios.
En primer lugar, buscamos a Dios por costumbre. Muchas personas tienen la costumbre de orar de madrugada, y presentar a Dios sus peticiones, sus vidas y pedir su dirección y guianza, pero en ocasiones nos olvidamos de esperar en Dios; así como es importante presentarte ante Dios, también lo es esperar su respuesta. Muchas de las decisiones importantes que vamos a tomar durante el día nos son reveladas y direccionadas cuando vamos ante la presencia de Dios en la mañana.
Que cada mañana puedas experimentar un nueva revelación en tu relación con Dios
En segundo lugar, para buscar y conocer más a Dios. Dice la palabra que el Señor ama a los que le aman y lo encuentran lo que temprano lo buscan. Muchas personas dicen que hay un horario específico para escuchar la voz de Dios. Y muchas veces yo lo he experimentado, aunque resulte difícil para muchos, existe un momento durante la madrugada donde nuestro Dios habla a nuestro espíritu y nos revela todas las cosas que debemos de hacer. Como en el caso de Moisés, donde él mismo Dios le dijo preséntate de mañana al pie del monte y yo hablaré contigo, y Dios le dio por segunda vez los mandamientos.
Me presento a Dios de mañana por devoción, por amor y no solo por rutina. Dios, Dios mío, eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas, David era un hombre apasionado por la presencia de Dios, él anhelaba tener un encuentro con Dios, aunque era rey, era un guerrero con muchas ocupaciones David no dejó que sus ocupaciones, y responsabilidades le impidieran tener comunión con Dios cada día.
Debemos poner nuestra relación con Dios como prioridad, por encima de todo valoremos nuestra relación con Dios. El mismo Jesús entendía esto muy bien. Dice en el libro de Lucas 5 que la fama de Jesús se extendía más y más; y se reunía mucha gente para oírle, y para que les sanase de sus enfermedades. Más él se apartaba a lugares desiertos, y oraba.
Jesús, aunque tenía muchas cosas que hacer, aunque tenía mucha demanda en el ministerio, tomaba un tiempo para descansar en Dios, tomaba un tiempo para hablar con Dios. A veces estamos tan cargados con las cosas que hacemos para Dios que no tomamos nuestro propio tiempo para relacionarnos y estar en la presencia de Dios. De nada me sirve que vengan muchas multitudes, muchas personas a donde mi si yo no estoy lleno de Dios.
Jesús sabía que no podía dar de lo que no tenía, él era Dios, pero también era hombre, y reconocía que si no se alejaba y buscaba a Dios, su vida espiritual menguaba. Así como nos preocupamos por la salud espiritual de los demás, así debemos preocuparnos por nuestra propia vida espiritual; porque solo damos de lo que estamos llenos. Si estamos lleno de presencia, llenos de amor y palabra de Dios, eso daremos, pero si estamos lleno de agotamiento, frialdad, eso es lo que transmitiremos a los demás.
Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma. David busca a Dios no solo para presentar sus peticiones y esperar la respuesta a sus oraciones, sino también porque amaba estar cerca de Dios y conocer sus caminos.
Hay revelaciones, hay visiones, hay secretos que solo lo recibimos en la madrugada, tal vez para nosotros es una hora de descanso, pero en el mundo espiritual es una hora donde hay mucha actividad espiritual tanto para lo bueno como para lo malo. En ese tiempo Dios revela visiones, palabras, muchos tienen encuentros y experiencias con Dios. Pero hay otros que están siendo ministrados, engañados y son atormentados por el Diablo y sus demonios.
Cada persona tiene un momento para presentarse con Dios, pero si este tiempo de madrugada como en la mañana no fuera importante, entonces Dios no nos demandaría que lo buscáramos a estas horas. Porque además de todo lo dicho, en estas horas podemos estar a solas, sin interrupciones, sin distracciones y así poder tener más intimidad con el Señor.
Empecemos a darle prioridad a orar de mañana. Aprovecha el tiempo y deléitate en Dios, empieza a buscarle día tras días y espera su respuesta. Que tu relación con Dios no sea interferida por los quehaceres, ni por tus responsabilidades, porque él mismo Jesús y él mismo David, que eran dos hombres muy solicitados, y con muchas responsabilidades no dejaron que nada se interpusiera en su tiempo de comunión y devoción con Dios. Así que ya no hay excusas para buscar a Dios de mañana, busca a Dios por amor y porque quieres estar cerca de él y conocer sus pensamientos y no solo por rutina.
Mi deseo es que tu relación con Dios sea espontánea, sea diferente cada mañana y no nos presentemos de manera automática ante la presencia de Dios. Procura mantener tu relación con Dios por encima de cualquier cosa.
Recuerda: El Señor ama a los que le aman, Y les hallan los que temprano lo buscan.
Ora: Señor, permíteme relacionarme contigo y conocer tus mandatos cada mañana. Este día me dispongo a presentar mi vida ante ti, esperaré en tu palabra y alabaré y bendeciré tu nombre.
Agradece.
¿Por qué estás agradecido? Gracias, Dios, porque tus misericordias para mi son nuevas cada mañana y porque ellas me seguirán todos los días de mi vida. Gracias, por recordarme que mi relación contigo tiene más importancia que cualquier otra cosa en el mundo.